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Jueves, 29 de octubre de 2015  |  NÚMERO 12 Año II Acceda a nuestra hemeroteca
DEBEN CUMPLIR LA NORMATIVA 50.001
Todo edificio sanitario público será de ‘consumo energético casi nulo’ en 2018
El uso eficiente de la energía, prioridad obligatoria del sector
 
Javier Barbado / Imagen: Cristina Cebrián. Granada
Todos los edificios públicos, instalaciones sanitarias incluidas, deberán lucir en apenas tres años la etiqueta de ‘edificio de consumo energético casi nulo’  (NZEB, por sus siglas en inglés), según ha dado a conocer este viernes el catedrático de la Escuela de Ingeniería de Sevilla, Servando Álvarez, durante la segunda jornada del XXXIII Seminario-Congreso Nacional de la Asociación Española de Ingeniería Hospitalaria (AEIH).

Joaquín Guerra (Plano Consultores); Daniel Ruiz (Aenor); Juan Gámez, (Agencia Sanitaria Costa del Sol); Luis Guerrero (Ingae); y Servando Álvarez, de Calener.

Esta medida, regulada por la normativa comunitaria 2010/31/UE, busca reducir el impacto de una realidad: el hecho de que, en los países desarrollados, más de la mitad de los edificios que habrá en 2050 ya existen en la actualidad. Por consiguiente, se necesita mejorarlos y reforzarlos limitando al máximo su gasto de energía.

Los NZEB deben incorporar una serie de instalaciones adicionales que justifiquen su uso eficiente de la energía, por ejemplo detectores de presencia por el movimiento, ventilación nocturna para climatizar, turbinas de viento, etc., todos ellos recogidos en la normativa europea y que España, como el resto de países, debe trasponer sin demora.

Además, el Estado está obligado no solo a instaurar estos requisitos en los edificios públicos, sino también a promover, por medio de ayudas y subvenciones, que los de naturaleza privada existentes o de nueva creación se hallen predispuestos a una mínima reducción de su consumo energético.

Por otro lado, Daniel Ruiz, auditor jefe en los sistemas de Gestión de Aenor, ha aludido a la normativa comunitaria sobre planificación energética, plasmada en la ISO 50.001 de 2011, regula la dirección y gestión de su ejecución, requisitos y fines. “Las características de esta planificación pasan por la eficiencia energética, el uso y el consumo de la energía”, ha precisado.

Forma parte de la revisión energética de cualquier empresa organizar la toma de mediciones para identificar oportunidades de mejora, de acuerdo con su exposición. “Estas auditorías sirven para detectar, conforme a la 50.001, aquellas operaciones necesarias para una gestión dela energía más adecuada y eficiente”, ha señalado.